Walter Tavares salva al Real Madrid en el último minuto ante el Alba Berlín (63-72). Decisivo el caboverdiano de nuevo para dar una nueva victoria en Euroliga, encarrilada desde el principio pero que estuvieron a punto de tirar los blancos en los últimos cinco minutos. Los de Aíto García Reneses consiguieron recortar una desventaja de 16 puntos al final, pero el regreso a pista del pívot madridista -que terminó con nueve puntos y 21 de valoración- decantó la balanza en favor de los de Laso. Acompañó la actuación de Causeur (13 puntos) y Alocén (12).
Visitaban los blancos el Mercedes-Benz Arena de Berlín en la jornada 23 de la máxima competición europea. Después de la victoria ante Panathinaikos el pasado martes, los madridistas buscaban una victoria a domicilio que confirmase las buenas sensaciones mostradas en el último encuentro. Ha sido precisamente en las salidas, donde más han sufrido los blancos en este curso, acumulando hasta su viaje a Alemania un balance de seis victorias y cinco derrotas.
Por fin podía volver a contar Pablo Laso con Rudy Fernández. El balear regresaba al equipo, después de lesionarse en la derrota ante el Estrella Roja. Un fuerte golpe en su castigada espalda le impidió estar en los últimos tres partidos de los madridistas, acusándose en exceso su ausencia contra Maccabi.
Como ha sucedido en los últimos encuentros de los blancos, que vestían en Berlín con su segunda equipación azul, el dominio se hizo notable desde el comienzo. Los madridistas controlaban el choque gracias, sobre todo, a su gran labor defensiva. Desde atrás empezaron a construir la victoria, imposibilitando los lanzamientos desde cualquier parte del parqué y mostrándose muy superiores al rebote.
El Madrid fue un equipo muy coral desde el principio. Además de defenderse con solvencia, lograban superar por dentro la defensa del equipo de Aíto. Alberto Abalde destacó ligeramente por encima del resto de sus compañeros, aunque la aportación en general de Thompkins, Tavares y Causeur. Una línea que mantuvieron durante los primeros 20 minutos y que les permitió marcharse 30-40 al vestuario, gracias a un triple del reaparecido Rudy -su primera y única canasta del partido- al borde del descanso.
Con el partido controlado desde el comienzo, los de Laso presentaban un guion similar al de los últimos encuentros. Los blancos han terminado sufriendo en los últimos partidos en los que contaban con una renta notoria, llegando a perder contra Maccabi o Estrella Roja. El control siguió durante el tercer cuarto, pese a una pequeña amenaza de los berlineses. Los madridistas se plantaron en el último acto con una ventaja de 12 puntos (47-59).
Los de García Reneses se quisieron enganchar al partido con dos triples consecutivos de Eriksson y Sikma. Se pusieron a seis, pero la reacción blanca no se hizo esperar. El Madrid volvió al rol del primer tiempo y Alocén, que fue el mejor de los blancos en el tercer acto, llegaron a establecer una diferencia de 14 puntos en el marcador.
Tavares salva un nuevo susto
Con todo a favor, los blancos contaban con una renta más que cómoda para afrontar los últimos 10 minutos. El acierto no cesaba y un mate de Thompkins puso el +16 para los blancos. La máxima ventaja en el partido para los blancos les daba más tranquilidad aún para encarar los instantes finales del partido. Laso sacó de la cancha a Tavares y entonces llegó el arreón del Alba.
El Real Madrid no se acostumbra a cerrar sus partidos a tiempo y cerca estuvieron de tirar el encuentro. A falta de seis minutos, los alemanes estaban a 13, pero firmaron un 8-0 que les ponía a dos entrando en el minuto final. Entonces regresó el caboverdiano a pista, para cerrar el partido.
Apareció Tavares en el poste bajo para matar al Alba con un 2+1. No falló desde la personal pívot madridista para encarrilar de nuevo la victoria, que terminaron sentenciando Thompkins y Deck, el primero con un gran tapón a falta de dos posesiones y el segundo con una canasta y dos posteriores tiros libres que pusieron el 63-72 final.
