El Tottenham no planea altas ni bajas

La crisis confina a Kane en Londres

La crisis financiera que deriva del coronavirus pone en jaque al Tottenham, que no pretende efectuar altas ni bajas este verano bloqueando su salida a Kane.

El Tottenham Hotspur tiene problemas. La situación financiera del club en estos momentos ha quedado al descubierto a raíz de la crisis ocasionada por el coronavirus. El club, que había tomado medidas y había ejecutado un ERTE a sus trabajadores, dio marcha atrás hace unos días ante la presión de la plantilla, que se reducirá el sueldo por el resto de los empleados de la entidad.

Es una gota más que refleja la situación actual. The Sun publica los líneas maestras que siguen estos días los Spurs, en concreto la percepción de la situación del cuerpo técnico, de José Mourinho. El portugués ya ha aceptado en qué posición queda el club tras la crisis que ha provocado la pandemia, con muy pocos recursos económicos que permitan acudir al mercado de fichajes e incorporar jugadores. Las pérdidas por contratos televisivos limitarán los recursos al máximo y solo habrá para cubrir los salarios.

Mourinho ya contempla ese escenario y lo acepta, según el mencionado rotativo, que divisa la próxima temporada con los mismos jugadores con los que acabará esta. En esa situación uno de los grandes perjudicados sería Harry Kane. El delantero inglés ya reconoció recientemente su interés de seguir creciendo como futbolista en otro lugar y eso pasa por un cambio de aires hacia un club de mayor calado, con el Real Madrid en el centro de todos los focos.

Esta situación complicaría más aún una posible salida del ariete. Daniel Levy, presidente de los Spurs, ya planeaba negociaciones duras y difíciles con los blancos pero esto bloquearía más aún la posibilidad. De hecho, la cúpula merengue ya es consciente de estas dificultades y están volcando sus esfuerzos hacia Erling Haaland, más joven, más barato y más factible que el británico en estos momentos.

No ha estado exento de polémica estas semanas el Tottenham de Mourinho, al que ya se le atizó por el nulo distanciamiento social en los entrenamientos que estaba realizando para mantener el estado de forma en un punto óptimo. Al portugués se le ve más implicado que nunca con sus jugadores, consciente en parte de que este grupo será el mismo con el que podría partir el próximo curso de constatarse y continuar esta crisis financiera.

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