Uno de los nombres con los que se ha relacionado al Real Madrid durante el confinamiento ha sido Matthijs de Ligt. El central parece no estar cómodo en la Juventus, cuando aún no se ha cumplido ni un año de su llegada al conjunto italiano. Los rumores sobre su posible salida en verano no han hecho más que sucederse, pero el conjunto bianconero no está dispuesto a dejarle marchar. La Juve se cierra en banda a que salga, según revela la ‘Gazzetta dello Sport’.
El neerlandés llegó en el último mercado estival a Turín. Su enorme temporada en el Ajax le convirtió en una de las promesas más deseadas del continente y fue el campeón italiano quien se impuso al resto de grandes. Sin embargo, su primer curso en la Juventus está algo lejos de las expectativas. Por ello, las voces que apuntaban acerca de una posible marcha eran cada vez más fuertes.
El encargado de fomentarlos habría sido su agente, Mino Raiola. El polémico representante se habría encargado de haberle ofrecido a varios equipos. Sin embargo, la Juventus no está por la labor de negociar la marcha de uno de sus principales activos, pese a que el coronavirus ha trastocado bastante sus planes económicos.
Uno de los equipos con los que se le había relacionado era el Real Madrid. El conjunto blanco busca reforzar la defensa, pese a contar con dos indiscutibles en el centro de la zaga. Junto a Upamecano, De Ligt era el gran candidato a convertirse en el tercero en discordia en el eje de Zidane.
El holandés cumple a la perfección con los requisitos para firmar por los blancos. A sus 21 años goza de una experiencia y un liderazgo al alcance de muy pocos, además de tener una calidad y proyección que nadie cuestiona. Sus condiciones le pusieron en su día en el radar madridista, del que no ha salido, y, además, es del agrado de Zidane. El técnico habría dado luz verde a la operación.
Otro de los grandes interesados sería el Manchester United. Los ingleses valorarían el hacer un intercambio de cromos con la Vecchia Signora, que no se cerraría a la posible vuelta de Paul Pogba. Sin embargo, en el precio a pagar por el francés, los italianos no contemplarían el desprenderse de su central.
