El Real Madrid está como loco porque el fondo soberano de Arabia Saudí compre por unos 343 millones de euros el Newcastle, ya que esta adquisición podría significar el adiós de Gareth Bale. Aunque a día de hoy no ha habido «ningún contacto ni con el equipo inglés ni con ningún club», la realidad es que la situación invita a ser negativo con la marcha del galés.
Los blancos están dispuestos a dejarle salir por unos 30 millones de euros, aunque están más que abiertos a la negociación y por unos 20 kilos podrían permitir que Bale haga las maletas. Es cierto que esa cantidad es un 80% menos de lo que el club pagó por el galés en 2012, aunque desde el Real Madrid defienden que Gareth «está más que amortizado».
«Hemos ganado cuatro Champions con él, ha marcado en dos finales, pero le ha faltado continuidad por las lesiones», dicen en el club. La realidad es que al Real Madrid le duelen los 17 millones netos anuales que tiene que pagar a Bale. Por Valdebebas todos son conscientes de su falta de compromiso e implicación con sus compañeros y con el propio club, aunque, como contamos en OKDIARIO, Gareth está dispuesto a quedarse en Madrid como mínimo un año más.
Bale no se quiere mover
El galés está dispuesto a continuar en el Madrid. De hecho, Bale ya le ha comunicado al club su intención de continuar una temporada más de blanco, un curso que a día de hoy no se sabe cuándo comenzará. Con el mundo paralizado por la crisis del coronavirus, el ‘11’ entiende que lo mejor tanto para él como para su familia es no moverse de la capital de España.
De esta forma, Bale ya ha expresado su deseo de continuar al club y la entidad madridista, en principio, no le forzará a salir, aunque si llega la ansiada oferta del Newcastle sí tratarán de convencerle. Desde Valdebebas, a pesar de que el deseo sería la salida del futbolista, se entiende a la perfección que la situación es complicada y no van a forzar su marcha.
