“No podemos hacer nada. Si ve amarilla está fuera”. Así de contundente se mostraba Zidane cuando en la rueda de prensa previa al encuentro contra el Espanyol era preguntado por las cuatro amarillas que acumula Casemiro y por el riesgo que corre si ve la quinta cartulina ante el Espanyol o frente al Valencia la próxima jornada.
El brasileño está en serio peligro, ya que una amarilla ante el Espanyol le impediría jugar contra el Valencia en Mestalla, un encuentro que se antoja complicado para el Real Madrid. Pero si consigue acabar el duelo ante los catalanes sin ser amonestado, el riesgo se trasladará al partido frente a los de Celades. Una amarilla contra el conjunto valenciano le apartaría del Clásico del Camp Nou que se disputará el próximo 18 de diciembre. Esto sí que sería un problema para un Zizou que no podrá contar ante el Barcelona con Marcelo y Hazard, ambos lesionados, y tiene la presencia de Bale en duda.
Casemiro es fijo para Zidane. Las cuentas son sencillas de hacer. El brasileño ha participado en todos los partidos oficiales que ha jugado el Real Madrid esta temporada y tan sólo se ha perdido 30 minutos ante el Galatasaray en Champions y otra media hora frente al Levante en Liga. El resto de los encuentros los ha jugado en su totalidad, sumando hasta la fecha 1.650 minutos. Por lo tanto, si ve una amarilla que le impida estar en Mestalla o el Camp Nou el problema para Zidane será muy serio.
El entrenador galo está convencido de que Valverde, su gran apuesta de la temporada, puede suplir a Casemiro en el centro del campo, pero también está seguro de que ante Valencia y Barcelona necesitará a sus dos pulmones en el centro del campo para salir victorioso. Case debe tener cuidado y cruzar los dedos.
