El Real Madrid cuenta en sus filas con un jugador talismán. Al menos, en la Liga Santander. Ferland Mendy es indiscutible en el lateral izquierdo del conjunto blanco y los números le dan la razón. Desde su llegada el pasado curso al club, ha disputado 30 partidos en el campeonato como titular y aún no conoce la derrota. Entre la pasada campaña y la presente, los de Zidane han perdido seis partidos en Liga, en los que Mendy no ha estado presente. El galo ha ganado 23 de los partidos ligueros que ha jugado, empatando otros siete.
Los registros no son fruto de la casualidad. Los blancos son más sólidos atrás con él sobre el césped. Sin hacer excesivo ruido, Mendy se ha asentado como indiscutible en el once de los madridistas. El francés llegó el pasado año como un recambio para Marcelo, pero consiguió imponerse al brasileño y hacerse con la titularidad gracias sobre todo a su aportación en defensa.
En el encuentro ante el Celta, Mendy volvía a la titularidad. Frente a los celestes disputaba su trigésimo partido liguero desde que fichó por el conjunto madridista, después de no estar en el empate contra el Elche que cerró el 2020. Al igual que había sucedido en el resto de encuentros de la competición doméstica en los que había jugado, el equipo no sólo no perdió sino que sumó tres puntos importantísimos en la lucha por el título, dejando también su portería a cero.
Y es que Mendy no sabe aún lo que es perder un partido de Liga. El francés es talismán para los blancos en la competición, al no haber caído aún en temporada y media que lleva en el club. En ese tiempo, los blancos han ganado un total de 37 partidos, empatando 12 y perdiendo seis, pero en los encuentros en los que los madridistas no sumaron, el titular en el lateral izquierdo fue Marcelo.
La rotación más activa de Zidane en este tiempo se ha mantenido precisamente en el carril zurdo. Hasta el tramo final de la temporada pasada, Mendy no logró obtener una continuidad clara en Liga. Fue tras el confinamiento cuando el técnico comenzó a darle minutos prácticamente sin descanso, algo que ha retomado en el último mes de competición, en el que la presencia de Marcelo se ha visto claramente reducida, tras la sucesión de malos resultados.
Sin embargo, Mendy ya fue el encargado de jugar el pasado curso los partidos ante rivales de mayor entidad. Pronto convenció a Zidane, que le colocó de inicio en partidos contra Barcelona, Atlético, Sevilla, Real Sociedad o Valencia. Viendo el nivel de algunos de los rivales a los que ha tenido que enfrentarse, el mérito de su imbatibilidad cobra mayor relevancia.
Clara diferencia con Marcelo
Entonces ya consiguió convertirse en la primera opción del técnico para los encuentros importantes, jugando 19 partidos de Liga, de los que se ganaron 13 y empatando seis. En lo que va de curso, se ha notado que la confianza de Zidane en él, respecto a la temporada pasada, se ha incrementado. No es para menos, pues los blancos han ganado nueve partidos y han empatado dos, lo que contrasta claramente con las tres derrotas cosechadas en los seis partidos en los que no jugó de inicio.
Mendy se ha convertido en un talismán en Liga para el Real Madrid. Todo lo contrario que su principal competencia por el puesto. Marcelo ha pasado de ser el mejor del mundo en su puesto y una pieza fundamental e incuestionable en un equipo que hizo historia, a convertirse en algo similar a un hándicap para los blancos. De hecho, es el único jugador que ha jugado de titular en todas las derrotas del Real Madrid en Liga desde que Zidane regresó al banquillo.
Mientras que con Mendy como titular en el campeonato los blancos no han perdido en 30 partidos, con Marcelo, en el mismo periodo de tiempo, los números reflejan una realidad muy distinta. En los 25 partidos que comenzó el francés en el banquillo, los madridistas firmaron un balance de 14 victorias, cinco empates y seis derrotas. Además, el segundo capitán del Real Madrid ha sido señalado en varios de los tropiezos como uno de los máximos responsables.
Clave para el cerrojo atrás
El bajón de rendimiento de Marcelo se ha producido en un momento en el que los blancos han encontrado a un sustituto de garantías para el carril izquierdo. La presencia de Mendy en el campo se refleja con una mejora considerable ya no sólo en cuanto a partidos sin perder, si no a goles encajados.
Cabe destacar que la defensa de los de Zidane se convirtió el pasado curso en la mejor de Europa, recibiendo un total de 25 goles en las 38 jornadas de Liga. De ellos, únicamente nueve se marcaron en los partidos en los que fue de la partida Mendy, demostrando su influencia en la faceta defensiva del equipo. Además, en el presente curso, seis de los 15 goles que ha encajado Courtois han sido con el francés desde el arranque.
Una vez más, los números vuelven a mostrar una realidad que, en este caso, es más que positiva para los intereses de Zidane y del equipo. Mendy ha logrado dar un salto que muy pocos esperaban desde que llegó a la disciplina madridista. El ex del Olympique de Lyon se ha convertido en uno de los hombres fuertes del entrenador, además de un talismán que asegura no perder.
