Zidane está en el punto de mira. El partido contra el City ha dejado tocado al entrenador francés que se la juega en el Clásico contra el Barcelona. Todo lo que haga el técnico será mirado con lupa en un partido que llega pocos días después de la debacle del equipo en Champions League. Eso sí, la confianza de la directiva en el galo sigue siendo máxima.
Porque Zidane contra el Manchester City no tuvo su día. Loas tras sus numerosas conquistas a parte, en el Real Madrid se vive al día y el francés no estuvo fino ni con la alineación ni con el manejo de los cambios ante un Guardiola que le ganó con claridad el duelo táctico. Ni parte de la directiva, ni afición ni incluso miembros del vestuario entendieron la decisión de relegar a Kroos en banquillo y lo que es más incomprensible, que ni siquiera calentara.
Por ello, y por alguna decisión poco coherente tomada en los últimos partidos, Zidane se la juega en el Clásico. En caso de debacle en el Bernabéu, el Real Madrid habrá dicho adiós a la temporada a primeros de marzo y los meses restantes olerían a drama. Tras la Supercopa Zidane era venerado por su capacidad para haber vuelvo a reconstruir un equipo hecho trizas, pero ahora vuelve a estar en el punto de mira… y con motivos.
Máxima confianza en Zidane
Eso sí, pese a una posible debacle y camino tortuoso hasta mayo, en el club hay máxima confianza en un Zidane que se ha ganado el respeto con creces. Sus galones de héroe de guerra en sus primeros tres años y su capacidad para recuperar a un equipo que se fue a la deriva la pasada temporada (pase lo que pase, el equipo ha demostrado que puede competir con cualquiera) dan todo el crédito necesario a un Zidane que decidirá su futuro «porque se lo ha ganado».
Pese al pesimismo establecido tras los malos 10 minutos contra el Manchester City, en el Real Madrid aún confían en revertir la situación. La remontada en el Etihad empieza en el Clásico de este domingo y en el club creen que el equipo puede volver a ser capaz de recuperar la buena versión que se vio en el mes de diciembre y enero.
