Eden Hazard va camino de convertir a Bale y Robben en dos jugadores de hierro en el Real Madrid. El belga, que se perderá el partido ante el Atalanta (y alguno más) por problemas en el psoas, sufre su décima lesión desde que llegó al Real Madrid hace temporada y media. Se ha perdido 55 partidos en sus 320 días en la enfermería de Valdebebas.
Fichado como el jugador franquicia de la era post-Cristiano, el Real Madrid pagó 120 millones por Eden Hazard, a pesar de que sólo le quedaba una temporada de contrato con el Chelsea. Tenía 28 años cuando llegó a la casa blanca. En sus siete temporadas en Stamford Bridge, Hazard sólo se perdió 20 partidos y sólo tres encuentros de baja en las dos campañas anteriores a fichar por el Madrid. Con Bélgica tampoco se perdía un partido.
En temporada y media en el Real Madrid ya se ha perdido 54 encuentros, que serán 55 con el del Atalanta y subiendo. O sea, cerca de triplicar las ausencias que tuvo en siete temporadas en el Chelsea en apenas año y medio de blanco.
Un Hazard intrascendente
Desde que está en el Real Madrid Hazard lleva diez lesiones, además de haberse contagiado de coronavirus. Sin contar el tiempo de baja por el protocolo Covid, el belga ha estado 320 días de baja en el equipo blanco. Y todavía falta por sumarse a esta baja de larga duración esta última lesión.
Debido a su propensión a las lesiones, Eden Hazard apenas ha jugado el 27% de los minutos totales de juego del Real Madrid (2.191 de 7.890). Un cifra bajísima si se compara con su etapa en el Chelsea, donde disputó casi el 75% de los minutos.
Sus estadísticas son tan discretas como su rendimiento. Tres goles en 13 partidos es el balance de Hazard esta temporada con el Real Madrid. En el club saben que tener al belga en la plantilla se ha convertido en un marrón y que deben idear fórmulas imaginativas para buscar una solución para encajar a Hazard en el Madrid del futuro. Hoy está más fuera que dentro.
