Eden Hazard será la estrella del Real Madrid ante el Galatasaray. La baja de jugadores importantes como Modric y Bale dejan al belga como principal responsable ofensivo del conjunto madridista, con permiso de Benzema. El principal refuerzo de los blancos en el pasado mercado estival tiene la obligación de salir al rescate de los suyos en Europa para evitar que la crisis madridista aumente.
Desde su llegada, el futbolista ha hecho pocas apariciones estelares. Sólo pueden destacarse dos. La primera fue en su debut, en el que tuvo oportunidades para marcar e incidió en el ataque con frecuencia para los 30 minutos que dispuso, y la segunda, frente al Granada, cuando marcó su primer tanto con la elástica madridista.
La lesión que sufrió antes de comenzar la temporada ha provocado que aún no se le haya visto en el estado de forma que se espera y no ha podido demostrar ser un jugador determinante como debería ser. El paso al frente de Hazard debe llegar ante el Galatasaray, en un partido que, ante pronóstico, va a ser clave para las opciones de clasificación del conjunto blanco en su competición fetiche.
El Real Madrid se la juega en Turquía y el futbolista tiene que aparecer. Será junto a Benzema el principal baluarte ofensivo del equipo. La ausencia de otras estrellas como Bale y Modric, cuya calidad les hace también ser decisivos, hace que el jugador tenga que coger los galones que le corresponden y ejercer de líder.
Además, llega con las pilas cargadas y con grandes sensaciones después de sus últimos encuentros. Hazard viene de marcar su primer tanto ante los nazarís y de completar un buen papel con Bélgica durante el parón. Además, el nacimiento de su hija le permitió evitar desgastarse ante el Mallorca. Tras el descanso en Liga, el belga llega en condiciones de coger las riendas del fútbol del equipo y comenzar a demostrar el tipo de futbolista que es.
