David Bettoni se ha convertido en protagonista inesperado en la previa del encuentro que enfrentará a Alavés y Real Madrid en Mendizorroza. El segundo entrenador será el encargado de sustituir a Zidane, que se ha contagiado de coronavirus y está aislado en su domicilio. El francés es mucho más que un ayudante excelente para el galo, también es su gran amigo y su compañero inseparable.
Zidane es un hombre reservado, pero los que mejor le conocen aseguran que cuando te da su amistad es para siempre. Algo así debió pasar con Bettoni, con el que coincidió en las categorías inferiores de Cannes. Ambos estaban en la misma residencia y fue David el que pidió ayuda a Zizou para poder curarse las ampollas provocadas por las botas. Al segundo entrenador le gustaba más el piso del técnico madridista, ya que tenía bidé. En ese momento surgió una relación que se mantiene hasta hoy.
Zidane no lo pasó bien en el inicio de su carrera. Se había separado de su familia, tuvo que superar momentos complicados y alguna noche llorando. Pero la aparición de Bettoni le ayudó para sobreponerse a todos esos malos momentos de la pubertad. Ambos se convirtieron en inseparables en la lucha por cumplir sus respectivos sueños de convertirse en jugadores profesionales. Lo que unió aquel bidé no lo ha podido separar nadie.
Juntos para siempre
Zidane comenzó a despegar su carrera. A los 20 años le fichó el Girondins y ya no paró de crecer, mientras que Bettoni, un año mayor que él, no era capaz de derribar la puerta desde su posición de defensa central y pivote. Por ello, cuando Zizou fue fichado por la Juventus decidió llevarse a su amigo del alma junto a él. David habla italiano, por lo que le ayudaría en su adaptación. Al mismo tiempo, el actual ayudante podría vivir una nueva experiencia en el país transalpino en su afán por viajar y aprender de otras costumbres en el fútbol. Eso sí, no dejó de jugar a la pelota. Avezzano, Alessandria, Lucchese o Brescello fueron los destinos del francés, que ya empezaba a asimilar que no llegaría a la élite más absoluta. Donde sí estaba su amigo.
Con el paso del tiempo, la amistad perduró y ambos volvieron a trabajar juntos, aunque esta vez en los banquillos. De hecho, hay quien asegura que fue Bettoni el que convenció a Zidane para ser técnico. Por ello, tras un primer año como segundo de Ancelotti en el primer equipo del Real Madrid, Zizou decidió dar el paso y ambos llegaron juntos al Castilla, donde comenzarían una carrera como técnicos llena de éxitos.
El papel de Bettoni es clave. Zidane es el carisma, la cara visible, pero David es el que trabaja en la sombra. El que prepara al equipo técnicamente. De hecho, es el encargado de organizar las charlas técnicas que posteriormente da Zidane a sus jugadores.
En definitiva, Zidane es mejor con David y Bettoni necesita a Zinedine. Ambos son inseparables, llevan una vida juntos y ahora esta relación vivirá un nuevo capítulo, cuando por primera vez el ayudante se ponga el traje de entrenador. El de su inseparable compañero de trabajo y de vida.
