Mallorca confirmó la evidencia. Esa que se lleva observando desde que se cerró el mercado y se revisó como quedaba la plantilla de un Real Madrid que necesita fichajes si quiere competir por todo de aquí a final de temporada. El equipo dirigido por Zidane necesita con urgencia un salto de calidad y eso sólo lo puede conseguir con una gran incorporación… o varias. Es conocido por todos lo difícil que es contratar con atino en invierno, pero los blancos se tienen que remangar y deben tener buen ojo para poder sumar al equipo calidad. Justo lo que se vio que faltaba en Son Moix.
El Real Madrid se mostró ante el Mallorca como un equipo impotente. Zidane se lamentaba de no haber tenido ocasiones tras el encuentro, pero el problema es mucho mayor. Esas oportunidades no se consiguieron porque el centro del campo no funcionó como debía. Isco no está, James lo intentó, pero solo es imposible, y Casemiro demasiado tenía con apagar los fuegos que generaba la defensa. Otra zona para analizar. Kroos y Modric no jugaron, pero los encuentros que han disputado demuestran que tampoco están pasando por su mejor momento. Sólo Fede Valverde saca la sonrisa de un Zizou que en Son Moix comprobó que de donde no hay, poco se puede sacar.
Por ello, para sacar algo positivo este curso, el Real Madrid necesita fichar y el nombre subrayado es el de Eriksen. El deseado es Pogba, pero el danés es mucho más factible que el francés. El club blanco aprovecharía que termina contrato en junio de 2020 para hacerse con sus servicios por un coste muy inferior a su valor de mercado, y los Spurs al menos sacarán algo por el danés que no quiere renovar.
Este verano, el Madrid pudo cerrar a Eriksen primero por 70 millones y más tarde, en los últimos días antes del cierre de la ventana, por un precio que rondaba los 55-60 kilos. El Tottenham ya sabía que su centrocampista estrella no iba a renovar e incluso firmaron a dos prometedores sustitutos como Lo Celso y Ndombelé, pero el danés rechazó ir al Manchester United y Zidane vetó su llegada a la capital de España, donde sólo esperaba a Pogba. Enero abre una nueva posibilidad de que Eriksen vista la camiseta del Madrid, algo a lo que obliga la voluntad del jugador y la necesidad del equipo blanco.
