El Real Madrid afronta el mes de febrero obligado a cumplir con nota en los seis partidos que tienen por delante. El conjunto madridista se jugará las pocas opciones que les quedan en Liga, donde cualquier pinchazo supondrá decir definitivamente adiós al título, antes de llegar a la ida de los octavos de final de la Champions League, que una temporada más apunta a ser la competición que puede salvar la temporada para los de Zidane.
Los blancos no tiran la toalla en Liga pese a la desventaja de 10 puntos que tienen con el Atlético de Madrid. De hecho, Zidane se ha mostrado más reivindicativo que nunca, solicitando en rueda de prensa respeto para él y sus jugadores, afirmando también que aún están vivos en dos competiciones y que darán la cara hasta el final.
El técnico ha declarado que no renuncian a ganar la Liga, pero para ello deberán reengancharse durante el mes de febrero. Los madridistas se ven obligados a darle la vuelta a la situación en la que han quedado tras la dura cuesta de enero. Durante el primer mes del año perdieron tres encuentros y empataron otro, quedando fuera de la Supercopa y la Copa, además de decir prácticamente adiós a sus aspiraciones por revalidar el título liguero.
Dos competiciones que salvar
El Real Madrid se verá en febrero con la obligación de salvar sus opciones en las dos competiciones que les quedan. Los blancos disputarán un total de seis partidos durante este mes, cinco de Liga y uno de Champions League y, si quieren darle la vuelta a la situación en la que se encuentran, necesitan sacar con nota todos sus enfrentamientos.
El conjunto madridista únicamente tendrá posibilidades de reengancharse a la Liga si son capaces de recortar puntos a un, hasta el momento, imparable Atlético. Los de Zidane no pueden dejarse más puntos si quieren entrar de nuevo en la pelea por reeditar el título logrado el pasado curso. Les toca ganar y esperar el pinchazo del líder que les permita acercarse en la clasificación. Todo lo contrario será decir definitivamente adiós a la lucha.
El conjunto madridista deberá empezar en Huesca. El del Alcoraz será el primer partido que jueguen en febrero. Llegan plagados de bajas, pero obligados a ganar para empezar a coger sensaciones de cara a lo que les queda por delante.
Una vez superen el encuentro ante el colista, deberán disputar el partido aplazado de la jornada 1 ante el Getafe. Los madridistas y los azulones comenzaron la temporada una semana más tarde, para poder disfrutar de cuatro semanas de descanso entre el final de la pasada temporada y el comienzo de la siguiente, dado que en agosto disputaron sus correspondientes partidos de Champions y Europa League.
Después, llegará la visita del Valencia a Valdebebas. El conjunto che ya sabe lo que es ganar en la presente temporada a los madridistas y los de Zidane deberán dar el máximo ante los de Javi Gracia para hacerse con la victoria, en un encuentro entre dos clásicos de nuestro fútbol que nunca defrauda.
Antes del compromiso que marcará el devenir del curso para los madridistas en Europa, deberán medirse al Valladolid. El Real Madrid visitará Zorrilla a pocos días del partido ante la Atalanta. No puede permitirse Zidane rotar, si quiere salir con todo en busca de la victoria ante el conjunto pucelano. Para cerrar el mes, les visitará la Real Sociedad que, aunque ha venido a menos en los últimos meses, ya sabe lo que es rascarle puntos a los blancos esta campaña. En el primer partido de Liga que jugaron los madridistas, los de Imanol consiguieron mantener su portería a cero y sacar un punto en Anoeta.
La Champions como salvación
Los madridistas no sólo están obligados a ganar sus encuentros en Liga durante este mes por recortarle puntos a los rojiblancos. También deberán hacerlo para disipar las dudas antes de la visita a la Atalanta Bergamasca. El conjunto blanco se ha complicado en exceso sus opciones en Liga, por lo que la Champions aparece como la opción más fácil, dentro de la enorme dificultad que tiene, por no decir la única para levantar un título al final del curso.
La visita al Atleti Azzurri d’Italia está marcado en rojo en el calendario del Real Madrid. Los madridistas vuelven a su competición fetiche y lo hacen obligados a clasificarse para los cuartos de final. Después de dos temporadas en las que han caído a las primeras de cambio y tras estar cerca de hacerlo en la fase de grupos esta temporada, por calidad e historia son favoritos para pasar a la siguiente fase.
Sin embargo, La Dea viene arrasando desde el pasado mes. El conjunto dirigido por Gasperini se ha mostrado prácticamente intratable durante los últimos encuentros, llegando a golear 0-3 al Milan, líder de la Serie A. En mejor forma que los madridistas, la Atalanta recibirá a los madridistas a finales de mes con el objetivo de mantenerse vivos antes de cerrar la eliminatoria en Valdebebas.
