Antonio Blanco tuvo su recompensa en la victoria del Real Madrid ante el Mallorca. Desde que el canterano aceptó el reto de seguir siendo jugador del Castilla, aunque viviendo en el día a día con el primer equipo, no había tenido la oportunidad de debutar con el conjunto blanco. Sí formó en el once titular que se midió al Linense en el debut del equipo dirigido por Raúl en el estreno del filial madridista en la recién creada Primera RFEF, pero aunque había entrado en todas las listas de convocados de Carlo Ancelotti no fue hasta el duelo contra los baleares cuando pudo cumplir su sueño de jugar por primera vez en el Santiago Bernabéu.
Ancelotti le prometió que si el partido iba bien tendría la oportunidad de jugar unos minutos. Y cumplió su palabra. En concreto, media hora en la que demostró sus cualidades. Con confianza saltó al verde para enseñar al madridismo su potencia. Jugando de mediocentro, donde le gusta a Ancelotti, adquirió una confianza que le vendrá muy bien de cara al futuro, donde espera seguir sumando minutos y teniendo protagonismo, aunque la competencia es feroz.
Antes de salta al césped Ancelotti le dio dos consejos de veterano: “Estate tranquilo y disfruta”. Antonio, que terminó el encuentro tremendamente feliz, disfrutó del momento, aunque durante la media hora que tuvo la oportunidad de jugar la emoción de la primera vez no le abandonó. Cumplió el sueño de cualquier canterano de jugar vestido de blanco en el Bernabéu.
La confianza de Ancelotti
Aunque no ha gozado de muchos minutos, Ancelotti ha estado muy pendiente de Antonio Blanco durante todo este tiempo. A sus 21 años, es una de las joyas de La Fábrica junto a otros como Miguel Gutiérrez, Arribas o Marvin, que también están en el radar de Carletto.
Antonio Blanco destaca por su oficio dentro del terreno de juego y su calidad a la hora de jugar con la pelota. Es el socio de todos en la medular, sabe dirigir, siempre es un apoyo para sus compañeros y no tiene problemas para sacar el balón desde atrás. A todo ello hay que sumar su excelente golpeo desde larga distancia. Ya está listo para la siguiente batalla ante el Villarreal, donde volverá a sumar si Ancelotti lo estima oportuno.
