La temporada del Real Madrid vuelve a depender de su actuación en Europa. La derrota ante el Levante, junto a la victoria del Atlético de Madrid en Cádiz, deja al conjunto blanco a diez puntos de la cabeza en la Liga Santander, con un partido más. Las opciones de los de Zidane de repetir el título logrado el pasado verano este curso se han complicado en exceso, dejando a la Champions League como la opción más factible para que los madridistas levanten un título al final de la presente campaña.
El Madrid volverá a dejar el éxito o el fracaso en manos de su competición fetiche. La máxima competición continental volverá a centrar de forma exclusiva la atención de la plantilla, una vez que ha dilapidado sus opciones en el resto de títulos que están en juego. El fatídico mes de enero ha dejado a los blancos sin Supercopa, fuera de la Copa del Rey y con posibilidades más que remotas de ganar la Liga Santander, por lo que se jugarán toda la temporada en la Liga de Campeones.
El equipo que dirige Zinedine Zidane retomará su andadura en Champions el próximo 24 de febrero. Entonces, el conjunto madridista viajará hasta Bérgamo, para disputar la ida de los octavos de final ante la Atalanta. El 16 de marzo, en el Alfredo di Stéfano, se disputará el partido de vuelta. En el caso de que superen los italianos, los madridistas estarán a dos eliminatorias de meterse en la final que se disputará en principio en Estambul el 29 de mayo.
La Liga, cuesta arriba
Los dos pinchazos de los madridistas en el último mes, complican en exceso sus aspiraciones de pelear la Liga al Atlético de Madrid. Los madridistas han ganado dos de los cuatro encuentros disputados en el campeonato en este inicio de 2021, empatando y perdiendo uno. A eso se suma que su andadura hasta la fecha no había sido inmaculada, pues habían perdido otros tres encuentros y empatado otros tantos.
En total, el Real Madrid se ha dejado 20 puntos en 20 jornadas. La derrota contra el Levante aleja al vigente campeón, que se ve obligado a no fallar en lo que queda de campeonato y esperar, además, los fallos de un Atlético que se muestra imparable. Los de Simeone apenas han cedido puntos en lo que va de curso. La última vez que lo hicieron fue con la derrota en Valdebebas y, desde entonces, encadenan ocho victorias de manera consecutiva.
Enero pasa factura
El primer mes del año no ha sido nada positivo para los blancos. Además de alejarse en la Liga Santander de los rojiblancos, han quedado apeados de la Copa del Rey y de la Supercopa, los dos caminos más sencillos para lograr un título al final del curso. El Real Madrid ha comenzado el año acusando la ausencia de varios jugadores importantes y el esfuerzo realizado durante los últimos meses, en los que Zidane no ha rotado y el equipo ha reflejado el agotamiento provocado por la falta de descanso.
El equipo cayó eliminado en semifinales de la Supercopa ante el Athletic, pero más sorprendente fue la derrota en dieciseisavo de final de la Copa del Rey. El conjunto blanco se quedó fuera ente el Alcoyano, dando una pésima imagen y quedando apartado a las primeras de cambio de la pelea por el título. Las dos eliminaciones, sumadas al ritmo frenético impuesto por el Atlético, que no están pudiendo aguantar en Valdebebas, les dejan como única baza posible este curso la Champions League.
La Atalanta, lanzada
No será la primera vez que los madridistas dependan en exclusiva de lo que suceda en la máxima competición. El Real Madrid, con Zidane en el banquillo, ha confiado su suerte a lo que suceda en Champions en otras dos ocasiones. Con la llegada del técnico en enero de 2016, todo hacía indicar que los blancos atravesarían una etapa de transición y sin embargo, comenzaron a firmar una de las páginas más destables en su extensa historia.
En dos ocasiones han salvado los madridistas la temporada con el galo en el banquillo gracias a terminar logrando la Champions. Algo que, como se demuestra año tras año, no es nada fácil. Los madridistas evitaron el año en blanco en 2016 y 2018, sumando dos nuevas Ligas de Campeones a su palmarés, y este curso todo apunta a que deberán confiar el éxito de la temporada a su devenir en la máxima competición.
No lo tendrán nada sencillo. La primera piedra en el camino será la Atalanta Bergamasca. Pese a que tras el sorteo de los octavos de final, parecía que la suerte había sonreído a los madridistas, durante el comienzo de 2021 ha dado un vuelco la situación. Los blancos estaban intratables en diciembre, pero con el inicio del año, el bajón ha sido considerable. Todo lo contrario que su rival.
La Dea ha metido miedo estas semanas a base de goleadas. Los de Gian Piero Gasperini han puesto en escena su enorme poderío ofensivo, pese a la marcha de su principal estrella, Papu Gómez, al Sevilla. En las seis victorias que han logrado en enero, han marcado un total de 21 goles, destacando la victoria por 0-3 ante el Milan, líder indiscutible de la Serie A.
