Vinicius Junior es uno de los jugadores más insistentes y constantes con los que cuenta el Real Madrid en su plantilla. A pesar de tener actuaciones discutibles en los últimos años, el atacante del conjunto blanco siempre ha seguido confiando en sus condiciones y trabajando por mejorar. Se vio recompensado en la mejor noche posible. Ante el Liverpool, el brasileño dio un golpe sobre la mesa, siendo el mejor del equipo y mostrando una efectividad impropia, con un doblete que acerca a los madridistas a las semifinales de la Champions.
El de cuartos de la máxima competición era el partido más importante y difícil de lo que va de temporada para el Real Madrid. Las bajas importantes con las que contaba Zidane y la grandeza del rival complicaban las opciones de los madridistas. Sin embargo, Vinicius, que si hay algo que no hace es esconderse, se convirtió en el héroe del partido.
Acostumbrado a no desistir e intentarlo una vez tras otra, el brasileño empezó a atacar desde los primeros minutos la espalda de Arnold. El Liverpool le dejaba espacio para correr y en velocidad hay pocos que puedan alcanzarle. Aprovechando el hueco y el mal día del lateral, hizo daño de manera constante, hasta que llegó el gol. No le hicieron falta varias intentonas para marcar, algo no muy habitual en él.
Estaba dispuesto a salir por la puerta grande y así hizo. Precisamente, fue la portería, la que esta vez no se hizo pequeña ante su presencia. Vinicius, acostumbrado a fallar lo imperdonable, esta vez estuvo fino en todo. Desbordó, controló un pase exquisito de Kroos y batió a Alisson en una gran definición que ponía en merecida ventaja a los madridistas. En la segunda parte, cuando peor lo pasaba el Madrid, aprovechó un pase de Modric cerca del punto de penalti para ajustarla al palo ante la pasividad de la defensa.
Un doblete que le catapulta en el momento más indicado, cuando el conjunto blanco encara el tramo final del curso con las dudas de Hazard y con opciones de levantar dos títulos. Se trata del primer doblete que marca el brasileño desde que llegara hace ya tres temporadas al club. Que pone de manifiesto que el trabajo y la constancia, a la larga dan sus frutos.
Reivindicación en el mejor momento
Si hay algo de lo que ha pecado Vinicius en todo este tiempo es de su falta de puntería. A pesar de su atrevimiento, desborde y calidad, se le ha acusado -y con razón- de no tomar las mejores decisiones en el último momento. Además, su falta de gol era una evidencia. Sin embargo, nunca ha dejado de trabajar para mejorar los aspectos en los que no estaba fino, llegando a entrenar de manera individual en Valdebebas para ir solventando sus problemas con el gol.
Ante el Liverpool consiguió reivindicarse. No había un escenario mejor que en un partido de cuartos de final de Champions y ante un rival de entidad. En la competición por excelencia del club, Vinicius ha dado un golpe encima de la mesa con una actuación que devuelve las esperanzas al madridismo de ver a su equipo peleando de nuevo por el título. Y lo hace en un momento muy delicado para él.
En el foco constante de las críticas y con detractores y admiradores a partes iguales, Vinicius aprovecha el que probablemente era uno de sus últimos momentos para ponerle las cosas difíciles a Zidane. Con Hazard saliendo de su última lesión, el canarinho apuraba sus últimos días como titular, a la espera de que el belga esté al cien por cien. Sin embargo, con su partido ante el Liverpool le manda un claro aviso: si quiere jugar, tendrá que ganárselo.
Su futuro en el aire
Vinicius se presenta para este tramo final del curso en un buen momento, buscando un hueco en el once que no ha logrado agarrar aún. Su constante intermitencia le ha llevado a colmar en ocasiones la paciencia de parte de la directiva y del propio Zidane, que aún así siempre le ha mostrado su confianza, hasta el punto de que el club se ha planteado ya su salida de cara al próximo mercado.
El Real Madrid no quiere venderle, pero sí que estarían dispuestos a incluirle en el fichaje de Mbappé, con el fin de abaratar la llegada del francés. De hecho, el PSG lleva mucho tiempo detrás de él. Aunque no son los únicos. La proyección del brasileño le ha llevado a convertirse en uno de los objetivos de varios de los grandes de Europa.
Además de los parisinos, otro de los interesados es precisamente el Liverpool. Contra los ingleses, Vinicius tenía ante sí una evaluación de Klopp, al que si ya le gustaba, después del roto que le hizo a su equipo, pensará que no se le puede escapar. Sin embargo, el brasileño no deja de mostrar el amor que siente por el Real Madrid. Un amor que, más allá de demostrarlo besándose el escudo, lo demuestra con su constancia y trabajo diario. Y ahora, empieza a darle sus frutos.
